jueves, 7 de mayo de 2015

Con Odio Jarocho

Chocoaventura por Rana Existencial en 14:10

Sí, por un lado, todos hemos enaltecido una que otra cosa en nuestro CV cuando buscamos trabajo. Que tire la primera piedra quien no. Sin embargo, por el otro, las empresas también mienten prometiéndonos cosas que no van a cumplir u ocultando detalles cuando están buscando llenar una vacante.

En mi último trabajo, me contrataron como asociada de Mercadotecnia y Comunicaciones en una prestigiosa consultoría de negocios de renombre internacional. Rimbombante el título y la empresa.

Según esto, mis funciones implicaban investigaciones de mercado, propuestas, programas de desempeño y desarrollo, entre otros; o bueno, aprender a hacerlo. Sin embargo, después de 6 meses en la empresa, el 85% de mis responsabilidades solamente no fueron más que ser una simple recepcionista/secretaria/asistente/niñera de mi jefe.

Principalmente, manejaba su agenda e itinerarios, reservaciones de vuelos, facturación (es decir, solicitar y verificar facturas ni si quiera elaborar presupuestos), contestar teléfonos y hasta abrir la puerta.

Sin ofender a todas aquellas dedicadas a estas labores pero no era para lo que me habían contratado, mucho menos para lo que me preparé. Uno no estudia una Licenciatura en Mercadotecnia ni Maestría en Psicoterapia para ser secretaria. Perdónenme, pero discúlpenme. Por supuesto, eso jamás lo mencionaron.

Además ya se imaginarán, si ocurrían detalles como: comprar un boleto de avión utilizando su nombre completo (ya que detesta su segundo nombre), no usar la tipografía que él quería en algún archivo, no bajar el mapa llegar a alguna cita que él mismo había agendado, no recordarle sus citas incluso personales o avisarle cuando alguien le enviaba un mail, chico grito que me echaba. Y pensar que había dejado una gerencia por eso.

Para rematar con broche de oro, mi contrato era por honorarios. ¡Gracias! O sea: ¿aguinaldo? ¿PTU?¿Pensión? ¿Seguro? ¡Olvídalos. . . Socia! Si te alcanza, lo pagas por tu cuenta, sino esperemos no lo necesites. Como el 99% de los mexicanos, eso no lo leí al momento de firmar.

Hablemos del horario: 9:00 – 19:00 hrs. de lunes a jueves con dos horas de comida. No está tan mal, pero de nada sirven dos horas de comida cuando no sales de la oficina. Por mis egresos actuales no podía darme el lujo de si quiera una comida corrida, entonces se volvió el tiempo que dedicaba a mis adoradas redes sociales, sumando un total de 10 horas diarias pegada a la pantalla.


Estar encerrada en una oficina 10 horas al día, encadenada a un escritorio, continuamente pegada a una pantalla, con un tipo que sólo le gusta gritar, definitivamente no es forma de vivir.

Imagen obtenida de Fratela


Posts Relacionados:


0 Testimonios:

Publicar un comentario