A pesar de haber anunciado mi salida de la empresa familiar
desde mediados de enero, fue hasta Septiembre que por fin lancé mi “empresa.”
Lo pongo entre comillas porque todavía es un bebé que apenas está tomando forma
y al que apenas le estoy dando dirección. Es decir, de empresa no tiene nada. Sí,
justo el 4 de Septiembre me dije es ahora o nunca y abrí su Facebook (el cual pueden visitar dando click en el link).
Aún estoy aprendiendo, literal. Es más: conforme más libros
leo, más vídeos veo o más sugerencias
escucho, más evidente es todo lo que me hace falta por aprender para quitarle
las comillas a mi bebé y empezar a verlo como un negocio hecho y derecho.
Llevo un mes y el próximo 20 de Octubre es mi primer evento,
un curso de Fundamentos de Marketing. No impartido por mí porque o me dedico a
la difusión y promoción o me dedico a desarrollar la presentación, ahorita
no puedo ambas. Sin embargo, esto implica pagar un salón, pagar un instructor,
pagar publicidad y andar del tingo al tango por toda la ciudad promocionando el
evento. Desde las presentaciones finales en la carrera, jamás había sentido
tanto estrés en tan poco tiempo.
Me gusta, claro. No obstante, implica estar un
miércoles a las 11:20 pm, publicando en mi blog porque no me dio tiempo de
hacerlo durante el día. (hoy no vi
Netflix).
Así es la vida.
Si les contara, la cantidad de veces este mes que he pensado:
“No puedo”
“No sé”
“Llegué muy tarde a esto de las redes sociales”
“No soy tan Millennial como otros Millennials”
“Mejor me regreso a la empresa familiar”
“No entiendo de qué me hablan los community managers”
”Puta, voy a perder dinero”
“Puta, mi padre me va a decir ‘te lo dije’” (ésta sí me
duele).
Por favor, que
alguien agarre las frases y me haga un meme porque no tengo
tiempo de hacerlo yo.
En un lapso de 30 días, he querido tirar la toalla más de 30
veces. Pero no. Me prometí a mí misma que no lo iba a ser y que voy a sacar la
casta como los grandes. Tal vez con este primer evento sí pierda dinero, ya ni modo. Sin embargo,
con el segundo, el tercero y con los que sigan a partir de éste, me irá mejor.
Sé que a esta vida vine
a aprender, para eso me pinto sola. Aunque este mes pierda un poquito de
dinero, lo importante es el largo plazo, no el corto.
Saben hoy fue curioso. Me di una vuelta al municipio de Boca
del Río, para dar una platiquita y promocionar el curso. Mientras esperaba a que me dieran la palabra, la
instructora en sesión pasó esta plática de Martha Debayle en Youtube que estaba evitando ver:
Mujeres Poderosas 2017, Martha DeBayle
Forbes México
Esta ocasión que el destino me hizo verlo porque no me podía salir del salón, Martha me ayudó
a recordar que debo mantenerme al pie del cañón de mi "empresita," aferrarme a
ella y tener fe tanto en ella como en mí.
¡Gracias Martha por el coraje que necesitaba después de 30
días de continuas dudas! Cuando necesite de nuevo coraje, te vuelvo a ver.
![]() |
Yo en la Capacitación para Mujeres Emprendedoras en Boca del Río |
No sé a donde me lleve este camino, pero sé que será a buen puerto.
Por cierto, sigan las redes de mi bebé:
Facebook: Antes Meridiano
Instagram: AM RelacionesPublicas
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1 Testimonios:
Excelente, no tires la toalla, metele con todo!!! Y bueno, calma, que los community manager hablan complejo pa que no nos demos cuenta que dicen puras obviedades. Esta muy chingón iniciar algo, es de admirarse y creo que el esfuerzo, el cansancio, el estrés y un largo etcétera son las cosas que valga la pena contar la historia en el futuro. Muchísimo éxito Ana!!!.
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