A mil por hora

Así somos las chicas: estamos saliendo con alguien o conocemos a alguien que nos gusta y neta, extrapolamos nuestras expectativas inmediatamente. No consideramos el tiempo que llevamos con esa persona, si quiera si la conocemos en realidad o no, no importa la situación ni el momento por el que estemos pasando. Nosotras ya nos fuimos a mil por hora.

Nos ilusionamos sin realmente tener bases para hacerlo. La realidad pasa a un segundo plano por completo, creyendo que absolutamente todo es cuestión de querer y que si ambos queremos, pues ya estuvo.

Lamentablemente, eso no es suficiente. Como dicen, cada cabeza es un mundo y no porque nosotros queramos o esperemos algo en particular, tiene que suceder pues depende también de la otra persona y lo que se venga con el tiempo.

Me parece mejor que cada que vengan esas ilusiones sin fundamentos, hacer un esfuerzo consciente por recordar en dónde estamos parados en este momento. Es bueno regresar al presente y disfrutarlo, ya después veremos qué más viene. Digo yo.

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