1. Algunos son positivistas, esperan lo mejor de todo y todos, lo cual les suele dar resultado.
2. Otros, en cambio, suelen esperar lo peor de todo y todos, lo cual les suele también dar resultado (seguido les va de la patada).
Los pesimistas sostienen que si no esperan mucho del mundo, manteniendo sus expectativas bajas, sentirán una mayor satisfacción cuando algo bueno acontezca. Por el contrario, si algo malo sucede, pues ya estaban preparados para ello. Lo malo es que cuando no esperas lo mejor, tampoco te esfuerzas por dar lo mejor; te mantienes pasivo ante la vida.
¿Los optimistas? Mmmm…. En realidad, no sé bien qué onda con su filosofía, quienes conozco así, se debe simplemente a una innata felicidad, podría decirse. No necesitan una verdadera razón para esperar lo mejor; sólo esperan lo mejor. Punto.
A mí más humilde parecer, siento que aquellos que son pesimistas es porque algo muy cañón les pasó muy chicos y probaron lo duro que puede ser el mundo no estando preparados para digerir ello. Es mi opinión, ninguna teoría constatada.
No creo que alguna filosofía de vida sea la correcta. Por mi parte, yo me alegro eufóricamente cuando algo bueno sucede; sufro amargamente cuando algo terrible acontece. Me encabrono, frustro, entristezco, molesto, alegro, cuando hay que. No suprimo las cosas ni porque sean rosas grises o de plano negras. Lo vivo, todo, como viene.
La vida tiene matices; muchos colores. El chiste es vivir cada uno; a cada emoción explorarla, analizarla, explotarla, darle rienda suelta y dejarla ser libre en nosotros mismos. Eso es lo que nos hace ser humanos y no máquinas autómatas.
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