Paseando a mis can-hijillos el viernes pasado, nos topamos con una cachorra hurgando las bolsas de basura que había en la calle. Se quería acercar, pero por los ladridos de mis perros, salía corriendo despavorida. Decidí amarrarlos a ellos en un poste para acercarme yo a la cachorra. Cuando me vio sin los perros, se fue acercando a mí, hasta que pude alcanzarla. La cargué, regresé por los otros dos y regresamos a la casa.
Enseguida la bañé porque apestaba espantosamente. Después
les serví croquetas a todos, las de la cachorra con desparacitante que tenía a
la mano. Comieron a velocidad de Flash, la pequeña haciendo un desmadre con las
croquetas y en cuanto terminaron volví sacarlos a los tres para darle la vuelta
a la cuadra.
Mentiría si dijera que es una bodoca hermosa, poco a poco,
deja sus mañitas de la calle. Ando entrenándola para hacer fuera de mi casa,
con lo que aún no tengo éxito. Tuve que levantar todo del piso, incluyendo las sillas
del comedor, por cualquier cosa.
Es juguetona cuando está despierta, pero en sí es más el
tiempo que pasa dormidita, así que puedo trabajar, cocinar, ver tele sin tanta
preocupación. Cuando me muevo de habitación, no importa si está en el quinto
sueño, por lo general se despierta y me sigue para volverse a dormir en el
cuarto al que me moví.
Es una bendición hermosa. Súper cariñosa y aunque ni mis
perros ni mi gata son fans de que les esté saltando queriendo jugar, con que la ignoren o le
gruñan tantito, ella agarra la onda y se va por su lado. Es feliz, aunque le
molesta la esté sacando como ocho veces al día por mi obsesión de que aprenda a
hacer fuera de mi casa. Tema que me estresa.
Sí me estoy encariñando muchísimo con ella, está toda
hermosis y es re linda. Sin embargo, teniendo dos perros, un gato y viajando
como lo hago, con más mascotas no puedo. El lunes fuimos al Veterinario para
confirmar todo estuviera bien y les aplicaran sus vacunas a todos. Fue un reto
llevarlos caminando a los tres porque tan cerca no está además hay que cruzar
una avenida transitada, pero lo logramos. Fuimos muy feliz en el trayecto.
A partir del “Ok” del Doc, empecé a anunciar que la estoy dando en adopción. Seguro habrá una persona que la pueda cuidar y querer tanto como la quiero yo. Espero encontrarla pronto.
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