¿Por qué a veces no podemos dejar de darle vueltas a una situación? Una y otra vez. ¿La vida era mejor en ese entonces? ¿Nosotros éramos mejores? Probablemente no. Probablemente debíamos pasar por ello para aprender algo de nosotros, sobre lo que queremos o sobre lo que no queremos, sobre quiénes somos. Tal vez lo que debemos aprender es a dejar ir: dejar ir culpas, resentimientos, rencores, corajes, ilusiones o fantasías pues para bien o para mal, lo hecho o no hecho, ya está.
Mejor aprender. De haber tomado una decisión incorrecta tiempo atrás, mejor no tomarla en tiempo presente. De haber tenido miedo en alguna ocasión similar, aprender a armarse de valor hoy. De haber lastimado o haber sido lastimado, aprender a perdonar a ti y a los demás.
Fluye ya que estancarse dando
vueltas a una situación no es la solución.
Tal vez la vida no te ponga de
nuevo enfrente a las personas o situaciones con quienes te sientes atorado, pero recuerda una
cosa: tú eres el que se siente atorado
con ellas y tú debes decidir cómo lidiar con ello porque sigue siendo tu vida la que estás viviendo.
![]() |
Imagen obtenida del Blog Gran Hermandad Blanca |
Posts Relacionados:
The right thing to do
No todo lo que brilla es oro
¿A qué estás dispuesto a renunciar para tener la vida que pretendes tener?
0 Testimonios:
Publicar un comentario