martes, 28 de agosto de 2012

Sentimiento de Culpa

Chocoaventura por Rana Existencial en 10:35
Desde el sábado, vi a una pequeña cachorrita atrás de los perros de “la colonia,” jugueteando frente a mi edificio, la cual me llamó mucho la atención. El domingo la encontré solita, igual junto a mi entrada; evidentemente la recogí. Pregunté con un par de vecinos y la señora de la tiendita, que maneja la información de toda la colonia, si sabían de quién era. Me comentó que era de una perrita que vive a unas cuadras, pero que se la habían regalado a otros vecinos, quienes a la mera hora no la quisieron y abandonaron.

Por supuesto, la metí a mi casa para darle de comer, beber, dejar que durmiera, descansara y jugara con mi gordo. Esos pocos días en la calle sí la acostumbraron a estar poquito a la defensiva para con Yakimeshi, no lo dejaba en paz y a él no le encantó tanto tenerla (aunque siempre se mantiene respetuoso de otros animales). Yo me empecé a encariñar con ella inmediatamente, ya saben su carita tierna, su pancita regordeta, su emoción cuando me veía, me ganaban.

Por la tarde que saqué a pasear a Yako, decidí dejarla a ella en el Garage para que también hiciera sus necesidades ahí. He de decir, que mi edificio sólo tiene 3 departamentos y que por las tardes no suele haber mucho movimiento, entonces pensé ingenuamente que mientras cerrara la puerta no habría problema. Aproveché para preguntarle a otros vecinos si no les interesaría adoptarla.

A los 5 – 10 minutos que regresé, Cuki (como empecé a llamarle), ya no estaba en ningún lado. Ni en el garage ni en la entrada de mi depa ni en el patio de atrás. No estaba. No supe si alguien entró o salió o cómo se haya podido salir. Ya no supe. Yo sé que fue irresponsable de mi parte dejarla en el garage de un edificio porque aunque seamos muy poquitos, hay cierto movimiento.

Estos días ya no la he visto; obviamente me siento mal, no puedo estar 100% segura de que está bien. Ni alcancé a tomarle fotos para poner para encontrarle un hogar. Mi primer rescate perruno fallido L. Indiscutiblemente, me ha ido mejor con los gatos rescatados. 

Espero de todo corazón, alguien más la haya recogido y la esté cuidando ahorita. Alguien que sea más responsable y la quiera mucho porque en las pocas horas que conviví con ella pude notar que es una perrita hermosa que tiene muchísimo cariño que dar.





(No, no es ella L)


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