viernes, 23 de diciembre de 2011

47. Crítica

Chocoaventura por Rana Existencial en 9:20
Para aquellos que no sepan, mi madre es de esas personas despiadadamente críticas. Podría estar frente a una obra de arte y lo primero que detectan son sus defectos, los errores; sin importar de qué se trate ni de qué hablemos.

Evidentemente, yo, sangre de su sangre, carne de su carne, también heredé un poco esa característica de su persona. Trato de evitarlo. En serio, trato de observarme lo mejor que puedo para darme cuenta de cuando estoy siendo compulsiva con algo o alguien. Es difícil: Complicado cambiar algo que se trae desde la cuna.

De hecho, me he dado cuenta que al salir con alguien, soy de esas personas cuyo punto focal es justamente lo que me desagrada del susodicho (y después me pregunto por qué me desencanto tan rápidamente de los pretendientes).

Díganme, ¿cómo diablos ser feliz así, si yo misma busco me decepcionen, a grado de preferir mandar todo a la mierda?

No, no es propio de alguien balanceado. No tengo ni idea de cómo aceptar a los demás tal cual son y lo peor es que no tengo idea de cómo cambiarlo.


Posts Relacionados:
Todo a su debido tiempo
No se vale
Descubrimiento
Tropecé de nuevo
My Love life SUCKS

1 Testimonios:

Anónimo dijo...

Uyyyy, este post me dió algo de miedo, jajajaja, naaaa, no te creas, ¡Está bien! Uno tiene que ser exigente en la vida, hay que buscar lo mejor siempre, en todo, ahora que si ya hay un defectito por aquí y por alla, no sé, supongo que mientras pueda arreglarse jajaja, en fin, divago.

Publicar un comentario