Hace unos días se me iluminó el cerebro y llegué a una conclusión interesante: así como solemos desarrollar patrones en nuestras relaciones amorosas, los tenemos en nuestras amistades. Ya sé, es una conclusión súper obvia, pero nunca me había puesto a pensar en eso.
Ambos casos, nos tienen en común y en ambos casos somos nosotros quienes escogemos a las personas que protagonizan dichos tipos de relaciones. Consciente o inconscientemente, nosotros estamos tomando la decisión de salir o llevarnos con alguien.
Como dice Fromm en su libro el arte de amar, alguien que ama algo (o alguien), no puede odiar el resto del universo, pues para él es una acción universal, no algo limitable. Entonces, a la hora de tomar decisiones, sobre todo en cuestión de relaciones humanas, difícilmente vamos a tomar las mejores cuando se trata de escoger amigos y ser pésimo para escoger pareja (o viceversa).
No se trata del extremo de que nuestros amigos nos estén tratando como trapo. Sin embargo, muchas veces podemos confundir una verdadera amistad, por personas que sólo están ahí de vez en cuando, si hay fiesta de por medio, no confían en nosotros, sutilmente nos utilizan. Eso no es una verdadera amistad y es de sabios reconocerlo para saberlo manejar mejor.
Al final de cuentas, no se trata de tanto de escoger a las personas correctas, más bien de dejar ir a las incorrectas (¡en ambos casos!).
Posts relacionados: "Amigos."
jueves, 28 de julio de 2011
Saber escoger amigos
Chocoaventura por
Rana Existencial
en
8:57
Debrayes
Buena Idea; Mala Idea
,
Consejillos de vida
0 Testimonios:
Publicar un comentario