Para mí, significa dos cosas importantes: poner atención y disfrutar.
Vivir se trata de estar presente, en el aquí y ahora ya sea acariciemos a un perro, viendo películas, escuchando música, besando a alguien o incluso trabajando (¿Por qué no?). Tenemos que ponerle atención a ese momento porque no sabemos cuándo tendremos otra oportunidad de vivirlo de nuevo. Eso significa adiós al trabajo, los problemas, las heridas, demás detalles que normalmente nos quitan el sueño; todo tiene un momento y un espacio, hay que empezar a respetarlos.
Por lo mismo, también se trata de disfrutar esos momentos. Si salimos tarde del trabajo, comprarnos un detalle para consentirnos a nosotros y/o a los nuestros; si estamos atorados en el tráfico subirle el volumen a nuestra música favorita, cantar a todo pulmón y bailar o aplicar el air-guitar, sacudirnos el estrés; si algo nos está saliendo mal, ignorarlo y salir, por un café, unos drinks, al cine, por un helado o simplemente a caminar.
No todo en este mundo es malo, siempre, depende de nosotros a qué le pongamos atención y cómo decidamos darle la vuelta: ¡hay que vivir nuestros días como si fueran los últimos! Entonces habiendo dicho esto, la tarea del día de hoy es disfrutar pues vida sólo hay una.

0 Testimonios:
Publicar un comentario