Primogénita de padres apasionados, pero workaholics. Nacida en el centro de dos familias feministas. ¿Qué esperaban de mí? Difícilmente iba a ser dócil, sumisa o la típica niña cuyas esperanzas giran alrededor de encontrar Novio. Me educaron para ser independiente, tomar mis propias decisiones, resolver mis problemas y crecer, acompañada o por mi cuenta (en su mayoría, por mi cuenta).
Estando en la primaria, mientras las demás niñas hablaban qué flores pondrían en sus bodas, yo añoraba con entrar a la Universidad y ser profesionista (junto con mi mejor amiga, quien también era de mi misma ideología). Mientras ellas describían a su príncipe azul maravilloso y perfecto, yo comentaba que antes de llegar a casarme me latería vivir con mi novio mínimo un año para asegurarme qué no nos fuéramos a matar en el primer mes (apoyando la unión libre desde los 11 yeah!). De ser sincera, evitaba tener relaciones serias e inclusive por muchos años literalmente pedía que mi The One no llegara pronto (sabía que no estaba lista para ello). Eso ya cambió; no me molestaría que apareciera y hasta posiblemente lo valoraría jeje.
Nunca pensé ni actué igual al resto; lo cual no creo que sea necesariamente malo. Lamentablemente, en esta sociedad, ser diferente, independiente, vivir la vida cómo quiero, hacer mis propios planes, estar loquita y ser un espíritu libre espanta a los prospectos. That’s the fucking story of my life! Según he visto: tener 25, haber sacado mi 1° coche de agencia, irme sola de vacaciones fuera de México, estar ahorrando para el enganche de un depa, etc etc, sí, de cierta forma impone. Como si fueran cosas que no quisiera compartir; pero pues simplemente si no hay con quien, no me privaré de ellas.
No soy fácil, si alguien me aburre lo mando al diablo instantáneamente; mi tiempo es muy valioso. Si alguien me late para free o lo veo sólo como amigo, se lo digo directamente al grano (y pobre si se clava, sobre advertencia no hay engaño). Además en suma, mi carácter es demasiado explosivo al estilo Katy Kaboom jeje y creo que sí cubro la definición de bipolar. Me parece, que de alguna forma los hombres están acostumbrados a que sus chicas los idolatren, les soporten todo, las amolden a su forma y técnicamente hayan salido de una cajita Sonrics. Evidentemente, esa no soy yo. Todo era más fácil cuando no involucraba sentimiento alguno; lo que daría por regresar a esa etapa, pero siempre hay que avanzar y no retroceder.
Pregunta: por ser yo misma, me debe costar más trabajo que a la mayoría? O de plano, ¿empiezo a comprar gatos?
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